La nueva configuración de la calle Otero Pedrayo incrementa el número de plazas de aparcamiento a casi un centenar. En concreto, son 94 plazas más otras 2 reservadas para vehículos de personas con discapacidad. Asimismo, hay media docena de plazas para aparcamiento de motos.
Ayer concluyó el trabajo de pintado de estos aparcamientos, pasos de cebra y demás señales de la calzada.
El establecimiento de la circulación en un sentido único, con entrada desde la calle Conde Vallellano y salida por la Avenida 25 de Julio, supone una mejora significativa de la seguridad tanto para peatones como para vehículos, facilitando el acceso a la avenida 25 de Julio, en cuya calzada queda eliminado el carril central que daba acceso hasta ahora a la calle Otero Pedrayo. Asimismo, se adelanta unos metros la señal de stop para la incorporación de los vehículos a la avenida 25 de Julio, mejorando la visibilidad de los conductores para acceder a la misma.
La adopción de la dirección única en esta calle está en consonancia con la que se aplica actualmente en la mayoría de las ciudades y villas con el objetivo de elevar la seguridad, ya que al circular los vehículos en un sentido único, tanto en los pasos de cebra como los vehículos que salen de los garajes o de las plazas de aparcamiento sólo hay que fijarse en un sentido para evitar cualquier posible incidente.
FINALIZACIÓN DEL PROYECTO
El proyecto de reforma de esta calle tuvo un coste de 84.000 euros, y fue financiado por la Diputación Provincial y el ayuntamiento de O Carballiño. La reforma consistió en un nuevo pavimento, con asfaltado en caliente; un tramo de abastecimiento de conexión entre la Avenida 25 de Julio y la calle Xosé Fariña Jamardo, y una mejora en el saneamiento, con el objetivo de resolver un problema de anegamiento que habia en el cruce de la calle Otero Pedrayo con la Avenida 25 de Julio; y, finalmente, el rediseño de las plazas de aparcamiento, que ahora son en batería y se incrementan en más de medio centenar de nuevas plazas.